Lo primero de todo nos gustaría saber cómo está Willy Tisaire tras un tiempo ausente de las pistas de basket. ¿Qué tal? ¿Cómo está?

Estoy mejor, todavía convaleciente de mi enfermedad y volviendo poco a poco a las pistas de basket.

Su andadura en el Doctor Azúa comenzó hace algo más de 30 años, ¿Qué se siente al ser gran responsable de la afición al baloncesto que se ha creado en el colegio? ¿Cuáles fueron sus primeros objetivos al llegar al colegio? ¿En algún momento pensó llegar a contar con casi 500 jugadores?

Es un orgullo tremendo que después de 39 años de permanencia en el colegio exista esta afición en el colegio. Los primeros objetivos al llegar al Azua fueron crear una base lo más amplia posible para poder desarrollar nuestro trabajo. Jamás pensamos que íbamos a llegar a ese número de jugadores-as fue un sueño cumplido.

Además de pasar mucho tiempo como coordinador y entrenador del Doctor Azúa, también pasó varias temporadas en el antiguo Mann-Filter. ¿Qué piensa de la situación actual que viven las secciones femeninas a nivel profesional?

La verdad es que Casademont ha hecho una apuesta muy fuerte por el baloncesto femenino, no solo con el primer equipo sino creando una estructura de base muy importante, y un equipo en LF2 donde trabajar con jugadoras de proyección.

En Aragón se ha creado una nueva asociación de entrenadores. Si pudiera pedirle algún punto en el que trabajar para mejorar, ¿Cuál sería?

Más formación continua para los entrenadores, clinics prácticos que vayan a la esencia del juego y ayuden a los entrenadores jóvenes a tener una base para poder trabajar elementos prácticos en sus equipos.

Actualmente, estamos viendo que se están formando muchas asociaciones de entrenadores en diferentes comunidades autónomas. ¿Por qué cree que está ocurriendo esto? ¿Qué beneficios cree que puede tener esto?

Existe un interés importante en la formación del entrenador y es normal que aparezcan organizaciones que permitan que ese objetivo se cumpla. Los beneficios serán muchos, pero mejorar la formación y defender los derechos de los entrenadores creo que son fundamentales.

Querría preguntarle más concretamente por el minibasket, ¿Qué objetivos se marca Willy cuando comienza una temporada con equipos de escuela, benjamines y alevines?

Que se enganchen, sobre todo que se enamoren del baloncesto, que se diviertan y a la vez haya un rigor formativo y un aprendizaje de los valores intrínsecos de este deporte.

Desde hace varias temporadas, en categorías minibasket (excepto en Alevin A) decidieron eliminar las clasificaciones según el resultado de los partidos para cambiarlo por los criterios implantados en la aplicación VADI. Alguien como usted con amplia trayectoria en estas edades, ¿Qué opinión tiene en este tema?

Creo que el VADI es una herramienta con un buen objetivo, pero al fin y al cabo, también es una clasificación donde hay unos puestos y unos ganadores. A mi me gusta la clasificación clásica con victorias y derrotas, creo que los niños deben de aprender a ganar y a perder desde pequeños.

En un entrenamiento de formación con cualquier equipo de los que dirige en su colegio, ¿Qué partes tiene un entrenamiento de Willy Tisaire?

Primero una fuerte parte de técnica individual, me parece fundamental. Después juego de 1×1, donde puedan aplicar esa técnica individual aprendida. Y finalmente, 2×2 y 3×3, además de juego de superioridades.

Y por último, para todos esos jóvenes coordinadores que están comenzando con gran ilusión en los colegios, ¿Qué consejos podría darles para intentar llegar a tener éxito en sus centros?

Que trabajen mucho, que sean organizados, que tengan una buena sintonía APA y colegio, que tengan visión de futuro, que aborden el tema de los padres con rigor pero de forma positiva y que tengan una buena comunicación con sus entrenadores.

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